Sociedad Fuertes olores emite Planta Celulosa Arauca
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Molestias en la población ha causado los fuertes olores que periódicamente se perciben desde la planta de Celulosa Arauco y Constitución ubicada en San José de Mariquina, situada a 50 kilómetros de Valdivia.
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16. Januar 2010
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Corrección
El vocero del movimiento ciudadano Acción por los Cisnes agregó que "todas las promesas que Celco hace de que esto no volverá a ocurrir son mentiras. Ellos saben y la autoridad ambiental también, que esto se volverá a repetir una y otra vez, porque simplemente las plantas de celulosa producen emanaciones mal olientes y peligrosas para la salud".
Araya aseguró que mientras el plantel industrial forestal permanezca en la zona, los habitantes de San José de la Mariquina y los de Valdivia, esporádicamente seguirán sintiendo estas fétidas emanaciones.
"Este nuevo episodio es un antecedente más que la Corema debería tener en cuenta para evaluar la petición de Celco para volver a producir al 100%. Una mayor producción implica una mayor contaminación al río y también al aire", comentó José Araya.
Celulosa Arauco y Constitución, Celco, Celulosa Arauco ó simplemente Arauco, esta controlada por el grupo económico de Angelini y se dedica a la fabricación de pulpa de celulosa y derivados como rubro principal.
La planta en José de la Mariquina se inauguró en el año 2004. Ese mismo año se vio involucrada en un escándalo ecológico. Al ponerse en marcha la planta generó una gran demanda de mano de obra, lo que benefició a los lugareños. En cambio los humedales del río Cruces, sufrieron una grave contaminación de dioxinas y en un grado menor metales pesados.
El Santuario de la Naturaleza Carlos Anwandter, en el río Cruces sufrió la muerte y emigración de la mayoría de sus aves silvestres incluidos los emblemáticos cisnes de cuello negro. Al conocerse esta situación se generó una movilización ciudadana, que luego daría inicio a la organización ambientalista Acción por los Cisnes, organización a la que pertenece José Araya.
La planta se ha visto obligada a cerrar varias veces por orden judicial, pues entre otros motivos ha tenido una producción mayor a la aprobada en el estudio de impacto ambiental.